Durante una visita emitida en un programa de entretenimiento en Estados Unidos, la artista de origen latino Jennifer López confesó que se enfrentó a varias dificultades para bajar el peso que ganó cuando se embarazó de sus mellizos, Max y Emme.

Durante la charla, López aseguró que pensó que sería muy sencillo volver a sus medidas anteriores del embarazo tras dar a luz, sin embargo, aunque perdió peso con mucha facilidad, le costó meses de entrenamiento el recuperar sus curvas.

"Me llevó mucho trabajo físico. Yo creía que iba a ser mucho más fácil porque siempre había estado en forma toda mi vida, pero no fue así. Subí mucho de peso porque eran dos, y al principio todo era genial, pero luego me llevó meses de esfuerzo hasta lograrlo", señaló.

Jennifer López regresa al entretenimiento como actriz, aunque se sigue esperando un material recopilatorio que incluiría temas inéditos para beneplácito de sus fans.